El cuidado de la piel se ha convertido en una necesidad que va más allá de la apariencia estética. Por ello, en los últimos años se han desarrollado una serie de productos cosméticos con diversas aplicaciones, enfocados a tratar ciertas problemáticas cutáneas. ¿Te gustaría saber qué hay detrás de estos productos y sus beneficios? Entonces, también querrás aprender de la dermofarmacia. Una especialidad en tendencia que requiere de profesionales expertos que sepan todo sobre su desarrollo y ejecución.

Así que, si quieres saber más, sigue leyendo. ¡Te contamos todo a continuación!

¿Qué es la dermofarmacia?

La dermofarmacia es una rama de las disciplinas farmacéuticas. Según la Real Academia Nacional de Medicina, se entiende como la disciplina científica que estudia y fabrica productos para la aplicación tópica. Cada uno de ellos puede ser con fines terapéuticos así como cosméticos.

Igualmente, esta especialidad tiene el objetivo de analizar la producción, el asesoramiento sobre sus aplicaciones y cualidades, y la comercialización de los productos cosméticos.

Por lo tanto, se entiende que los productos dermofarmacéuticos facilitan el cuidado de la piel que tiene daños y de la piel que quiere prevenir lesiones. Estos productos también se pueden usar como complemento a los tratamientos de enfermedades dermatológicas.

¿Qué es cosmética y dermofarmacia?

La cosmética es una disciplina derivada de las ciencias de la salud que tiene tres funciones principales: función higiénica, función eutrófica (ayuda a mantener las funciones de la piel) y función estética.

Sin embargo, actualmente, la cosmética se ha constituido como una gran industria en la que participan la química, la biología, la farmacia y la medicina. En este sentido, se divide en diversos sectores: facial, corporal, capilar, perfumería e higiene.

Teniendo en cuenta lo anterior, la dermofarmacia es la rama de la farmacia que estudia, fabrica y expende productos cosméticos. Así que, ambos conceptos se enfocan en el cuidado de la piel y en potenciar el bienestar de las personas.

Dermocosmética: un punto medio

Como resultado de esta fusión de disciplinas, surgió hace algunos años un nuevo concepto: la dermocosmética. Esta es el equilibrio entre la cosmética tradicional y un medicamento. Sus desarrolladores se basan de los principios médicos y de esta forma, los productos deben salir al mercado con los mismos estándares de calidad y eficacia que un medicamento.

Una de las principales diferencias entre los productos cosméticos y los dermocosméticos es que los resultados de los últimos están probados científicamente. Todo ello con la intención de garantizar la seguridad y eficacia.

Tipos de productos dermofarmacéuticos

Podemos decir que los productos dermofarmacéuticos se encargan del cuidado de la piel, no solo dañada, sino de la piel sana con el fin de evitar lesiones y mantenerla siempre radiante.

Algunos ejemplos de productos más comunes es el de proteger la piel frente de las agresiones externas, especialmente de las radiaciones solares ultravioleta. También podemos englobar el maquillaje, las cremas antiarrugas, reafirmantes, nutritivas e iluminadoras.

En esta clasificación también entran los champús y lociones destinados al cuidado de la piel. Incluso, se engloban productos de dispensación farmacéutica.

Igualmente, podemos diferenciar entre algunos de los grupos de dermocosméticos:

  • Veganos: son aquellos productos que además de ofrecer resultados garantizados y una aplicación eficaz, también aseguran no hacer pruebas de efectividad en animales.
  • Naturales: la mayoría de los componentes de estos productos son de origen natural. Sin embargo, es posible que algunos de sus componentes, contengan principios activos o componentes químicos.
  • Ecológicos y orgánicos: estos productos cumplen normas exigentes que se centran en el proceso de extracción de los principios activos, tratamiento, embalaje, respeto al medioambiente, listado de ingredientes, etc.

¿Dónde aprender de la dermofarmacia?

Si quieres saber qué es la cosmética y dermofarmacia, no te puedes perder nuestra maestría en línea la cual te dará todos los conocimientos para aprender a fondo sobre estas disciplinas.

El programa de esta titulación está especialmente diseñado para aquellas personas que quieran reunir habilidades sobre dermocosmética y que quieran asegurarse un recorrido ascendente en esta área, con una especial consolidación de competencias.

Estudiar dermofarmacia y cosmética

Además, permite conocer el concepto, historia y legislación de la cosmetología y dermofarmacia. Así como la piel, los tratamientos corporales y faciales, el sudor y olor corporal, el cuidado de manos, uñas y pies.

Por otra parte, enseña sobre la salud bucodental, los cosméticos para el afeitado, depilación y solares. En esta misma línea, muestra información sobre la cosmética capilar, peinado y decorativa. Igualmente, cuenta con unidades que explican las características de la piel del bebé, entre otros aspectos relacionados.

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