Actualmente, una parte de la población mundial se preocupa cada vez más por el cuidado del medio ambiente y por implementar la economía sustentable. Este concepto hace referencia a la producción de bienes y servicios al mismo tiempo que minimiza el consumo y el desperdicio de recursos, agua y fuentes de energía. ¿Te gustaría saber más del tema? No te pierdas el blog o fórmate de manera profesional con nuestra Maestría en Energía Solar Fotovoltaica.

¿Qué es economía sustentable y sostenible?

La economía sustentable pretende cerrar el ciclo de vida de los productos con el objetivo de reducir el impacto ambiental que conlleva su fabricación y posterior deshecho. De esta manera, propone una transformación a la idea de solo usar y tirar. Básicamente, plantea un nuevo sistema de sociedad que utilice y optimice los residuos para darles un segundo uso y favorezca con ello su reutilización.

¿Cómo hacer una economía sostenible?

Desde un inicio, el producto debe pensarse para ser reciclado al terminar su uso con el objetivo de hacer los residuos en nuevas materias primas. Esto es algo muy positivo porque, además, puede generar nuevos puestos de trabajo. Así, cuando se diseña un automóvil, un microondas o cualquier otro bjen de consumo hay que visualizar su utilidad y aspecto ecológico. De la misma manera, debe quedar muy claro qué pasará con cada una de sus piezas cuando ya no funcione.

Características de la economía sustentable

La implementación de una economía ecológica en cualquier parte pasa por la gestión de políticas dirigidas a promocionar el uso de fuentes de energía sostenibles. También, busca fomentar la competitividad de empresas sostenibles que inviertan en innovación y desarrollo. Así pues, este sistema socioeconómico se basa de los siguientes pilares básicos:

  • Cuidado al medio ambiente: proteger la biodiversidad del planeta, evitando lo más posible la contaminación a la naturaleza para combatir el cambio climático.
  • Utilización de energías verdes: fomentar la utilización de energías renovables que no contaminen y reduzcan el impacto ambiental.
  • Mayor eficiencia en recursos: gestionar y usar en su máxima expresión los recursos que hay y cuidar los que no son renovables. Con esto alcanzaremos la eficiencia en la materia prima.
  • Apostar por el reciclaje: desarrollar un sistema de economía circular en el que los residuos generados sirvan para crear productos nuevos. Así, se irá disminuyendo la huella ecológica del sistema actual.
  • Disminuir el consumo de recursos: evitar el gasto innecesario de recursos renovables para que perduren y para que a largo plazo puedan usarse más que los no renovables.
  • Generar conciencia: educar e innovar todos los sistemas de consumo para mejorar el nivel de vida social de todos los territorios.

Una manera de empezar a desarrollar la economía sustentable es haciendo que la economía doméstica sea igualmente sostenible y se mantenga así en el tiempo. Para ello es muy importante favorecer el ahorro.